El Portal de los Aeropuertos en Argentina

Creció un 59% la cifra de pasajeros en el aeropuerto

El jefe de la aeroestación Comandante Espora detalló cómo es el funcionamiento del complejo, a casi cuatro años de su reforma, y no descartó nuevas ampliaciones, pensando en la posibilidad de utilizarlo en vuelos internacionales.

A casi cuatro años de su remodelación y puesta en valor, el Aeropuerto Bahía Blanca-Comandante Espora parece haber recuperado su impronta funcional con 41 vuelos semanales, lo que representa un 400% más de prestaciones desde la concesión, a lo cual se suma un significativo aumento en la demanda, alcanzando los 240 mil pasajeros durante 2012, un incremento del 59% respecto del año anterior.

Las interpretaciones para entender estas cifras son diversas, pero podrían resumirse en el hecho de que Espora se ha convertido, a los ojos de los bahienses, en un complejo moderno, acorde a las necesidades de la ciudad, para volar hacia o desde Buenos Aires, Mar del Plata y la Patagonia. A esto se añade que la brecha de costos entre los tickets aéreos y los pasajes de micros de larga distancia se redujo considerablemente en los últimos años.

Pero así como resultan innegables las mejoras de infraestructura y servicios realizadas, también es válido resaltar que todavía queda pendiente la operatividad nocturna de la pista principal, una obra largamente esperada que frena el despegue definitivo del aeropuerto como uno de los principales de la provincia, así como la ampliación en la oferta de destinos, tanto nacionales como internacionales.

Sobre algunos de estos temas conversó Carlos Alberto Millán, jefe del aeropuerto desde diciembre de 2010 e integrante de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), para conocer el futuro inmediato de una herramienta clave para el desarrollo estratégico de Bahía.
     --¿Se puede decir que la reforma está finalizada o hay ampliaciones proyectadas?

    --El edificio, tal como se planificó en 2008, con la concesión que le otorgó el municipio a Corporación América y Arecco Ingeniería, ya está terminado. Pero hay ampliaciones proyectadas porque sabemos que un aeropuerto es la vidriera de cualquier ciudad. Hacia donde va la ciudad, debe ir el aeropuerto. Y hoy Bahía tiene muchas intenciones de expandirse a nivel mundial. Hay industrias muy grandes que exportan y está ubicada en un punto neurálgico muy importante, sobre todo en relación a la Patagonia. Por eso hay muchas ideas.
     --¿Por ejemplo?

   --En el caso del edificio, existe la idea de irse hacia el lado de la ruta, con la intención de hacerlo internacional. No como Ezeiza o Córdoba, pero sí que tengamos la chance de tener un flujo al exterior, en donde puedan trabajar Aduana, Inmigraciones y Sanidad de Fronteras sin inconvenientes, siempre pensando en la posibilidad de vuelos chárter, algo que es muy esperado por las compañías de turismo, o en destinos como la ciudad hermana de Talcahuano.
    --Considerando estos posibles servicios, ¿cuál es la situación de la pista principal?

    --Sabemos que la licitación ya salió, que hubo cinco oferentes y que hay un preadjudicatario, pero este tipo de procesos son lógicamente largos. Por ahí esperábamos empezar con la obra antes, pero tendremos que esperar hasta marzo o abril. A partir de ahí, será un intenso trabajo de 300 días, que incluirá una repavimentación especial de hormigón, para aguantar 80-90 toneladas, una ampliación de la plataforma y un balizamiento con ayudas visuales como el ALS (Approach Lighting System), lo que nos va a permitir estar operativos aun con las nubes bajas.

Hoy esa pista, que tiene unos 2.630 metros de largo por 60 de ancho, concentra el 85% de las operaciones porque sólo puede tener un uso diurno. Pero, una vez que terminen las obras, nos va a dejar en condiciones para que tengamos todas las posibilidades del mundo: vuelos internacionales, chárters, cargas o lo que se pueda imaginar.
     --¿Cuál es la situación de los servicios ofrecidos?

    --En este momento hay 41 vuelos por semana, entre Aerolíneas Argentinas, LAN y Sol. Es un buen número en comparación con 2008, cuando había sólo 8 vuelos, o con 2009, cuando había 13. Hoy estamos ofreciendo viajes a Buenos Aires, Mar del Plata, Trelew y Comodoro Rivadavia. Al sur van prácticamente completos y el resto de los destinos está siempre dentro de un promedio del 80% de su capacidad. Esto se puede ver con la cantidad de pasajeros que pasaron por el aeropuerto. En 2011, por ejemplo, hubo 149.017 y, el año pasado, 236.933.
     --¿A qué lo adjudica?
   --A la competencia que hay, con una muy buena oferta de pasajes. Y parece que este año sigue la tendencia creciente, porque ya en enero tuvimos 18.000 personas, casi 4 mil más que en el mismo mes de 2012. Por eso estamos viendo de conseguir algunos servicios que vayan más hacia el sur, con aviones un poco más grandes, pensando en destinos como Río Gallegos, Río Grande y Ushuaia.
     --Para entender estos números, ¿cuánto tiene que ver el impulso que recibió el aeropuerto en los últimos años?
   --Mucho, porque la gente que viene a Bahía, que en muchos casos es gente de afuera y muy importante, ve un aeropuerto moderno, completamente diferente al anterior. Llega, se encuentra con la posibilidad de ir a un salón VIP, de alquilar autos, de embalar su equipaje, de hacer autoconsulta de vuelos. Es realmente otra cosa y le dan ganas de volver a utilizarlo.
      --Ya que menciona las comodidades, otro de los temas que siempre se menciona es el estacionamiento, ¿está prevista su concesión?
     --La playa de estacionamiento hoy tiene capacidad para unos 400 autos y también tiene contemplada una ampliación. Cuando uno entra, ve los autos sobre la mano izquierda mientras que, a la derecha, está todo parquizado. Bueno, esa zona está reservada para una nueva playa más grande. Ahora, respecto de la concesión, no tengo demasiadas precisiones. Es un tema pendiente, que hay que acelerar.
      --La última tiene que ver con la seguridad, que se ha convertido en un tema sensible para cualquier aeropuerto, ¿cómo se encuentra Bahía en ese sentido?
     --Bueno, después de septiembre de 2001 cambió toda la aviación a nivel mundial y los controles se han vuelto muy estrictos. Y no podemos ser ajenos porque, además de tener conciencia de lo que significa, tenemos una inspección anual de la Organización de la Aviación Civil Internacional, que determina todas las normas y restricciones y, a partir de sus inspecciones, hacen una catalogación. En ese sentido la Argentina y Bahía se encuentran muy bien catalogadas.

 


Espora en cifras

43 años pasaron desde su inauguración, el 26 de enero de 1970.

 

55 millas a la redonda, y hasta 20.000 pies de altura, es el área de cobertura de la torre de operaciones.

41 vuelos comerciales pasan cada semana por sus pistas.

 

3 líneas aéreas ofrecen sus servicios: Aerolíneas Argentinas, LAN y Sol, además de jets privados, taxis aéreos y helicópteros.

236.933 pasajeros utilizaron el aeropuerto a lo largo de 2012. Es un incremento del 59% en comparación con los 149.017 de 2011.

 

3.500 metros cuadrados es la superficie total del complejo, tras la última reforma.

Fecha: 2013-02-19

Fuente: La Nueva

Enlace: http://www.lanueva.com/edicion_impresa/nota/18/02/2013/d2i010.html

 

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